Por: Vicente Manuel Prieto Rodríguez
El Partido Republicano del presidente de Estados Unidos, George W. Bush, lanzó el viernes una propaganda en la que aparece la imagen y las palabras del líder de al Qaeda, Osama Bin Laden, junto con la advertencia de que "estos son los riesgos" en la elección del 7 de noviembre.
BBC Mundo. 21/10/2006
Una vez más el Partido de Bush, de cara a elecciones, utiliza la nada noble y burda treta del “autoterrorismo” para propiciar votaciones a su favor.
Ahora ha aparecido una propaganda, creada y difundida por el partido republicano donde se muestra al líder de Al Qaeda, Osama bin Laden y unas supuestas palabras suyas: “Lo que está por venir será aún mayor”.
Los estadounidenses además de ver cómo sus libertades ciudadanas disminuyen y en algunos casos desaparecen, tienen que soportar una verdadera tormenta de informaciones propagandísticas cuyo único objetivo es provocar inseguridad interna, necesidades de protección (que supuestamente solo puede brindar un gobierno republicano con Bush a la cabeza) y un temor y odio visceral hacia otras culturas, para ellos desconocidas o incomprensibles, ajenas a sus cánones de vida económico-social.
El actual gobierno de la Casa Blanca insiste en su política de “cruzado” del mundo e intenta tapar el sol con un dedo: no es secreto para nadie que quiera conocerlo el empantanamiento de la guerra en en el Medio Oriente, aunque Bush se empeña en llamarle victoria y hasta ha asignado una enorme cantidad de presupuesto para celebrarla sin mencionar los más de 2 600 norteamericanos muertos solo en Iraq ni los que siguen muriendo o afrentan serias lesiones físicas y psicológicas a causa de esta “guerra ganada”; tampoco puede ocultarse ya que bin Laden es un producto neto de los servicios de inteligencia estadounidenses, ni que el propio “gendarme internacional” ofrece refugio a destacados terroristas de origen cubano (léase Posada Carriles, Orlando Bosh y todos los miembros de la FNCA, con sede permanente y protección en Miami), promueve la violencia y desestabilización en cualquier parte del mundo donde tenga intereses puramente económicos, sobre todo relacionados con el petróleo y practica la política del cuervo: comerse los huevos de los demás, pero gritar cuando otro intenta comérselos. Si esto fuera poco averigüe por qué Estados Unidos se niega a firmar el Protocolo de Kyoto y no quiere hablar de sí mismo en términos de desarme nuclear.
Como para reafirmar la validez del miedo, resulta que ahora aparecen también restos de víctimas bajo los escombros del Trade Center, después de 5 años, lo cual puede ser verdad, ¿pero no es sospechoso que resurja el fantasma del 11 de septiembre justo en época de elecciones?
¿Hasta cuándo el pueblo norteamericano va a soportar a Bush y sus secuaces? Eso nada más depende de que los habitantes de esa potencia económica se den cuenta de que están siendo manipulados vulgarmente, que ya no tienen derechos en el país que proclama la “defensa a nivel mundial de los derechos humanos”, que ocultan bajo sus narices a quienes deben combatir y encarcelan, vejan y torturan a verdaderos luchadores antiterroristas, como los Cinco Héroes Cubanos Prisioneros del Imperio.
Para mí, solo es cuestión de tiempo. Los grandes imperios nunca fueron eternos y este no será una excepción, se encuentra atrapado en sus mentiras, en sus desajustes e inseguridades sociales, véase el caso del huracán Katrina y Nueva Orleans, en su manía de exportar “guerras preventivas” con oscuros propósitos enmascarados bajo una fina tela de legalidad.
Lo repito, el pueblo estadounidense (pueblo en la acepción martiana de esta palabra) lleno de personas inteligentes y humanas, se dará cuenta de tanta injusticia en su contra y tomará cartas en el asunto para revertir una situación que cada vez más se le hará insostenible. La Historia tiene la última palabra.
El Partido Republicano del presidente de Estados Unidos, George W. Bush, lanzó el viernes una propaganda en la que aparece la imagen y las palabras del líder de al Qaeda, Osama Bin Laden, junto con la advertencia de que "estos son los riesgos" en la elección del 7 de noviembre.
BBC Mundo. 21/10/2006
Una vez más el Partido de Bush, de cara a elecciones, utiliza la nada noble y burda treta del “autoterrorismo” para propiciar votaciones a su favor.
Ahora ha aparecido una propaganda, creada y difundida por el partido republicano donde se muestra al líder de Al Qaeda, Osama bin Laden y unas supuestas palabras suyas: “Lo que está por venir será aún mayor”.
Los estadounidenses además de ver cómo sus libertades ciudadanas disminuyen y en algunos casos desaparecen, tienen que soportar una verdadera tormenta de informaciones propagandísticas cuyo único objetivo es provocar inseguridad interna, necesidades de protección (que supuestamente solo puede brindar un gobierno republicano con Bush a la cabeza) y un temor y odio visceral hacia otras culturas, para ellos desconocidas o incomprensibles, ajenas a sus cánones de vida económico-social.
El actual gobierno de la Casa Blanca insiste en su política de “cruzado” del mundo e intenta tapar el sol con un dedo: no es secreto para nadie que quiera conocerlo el empantanamiento de la guerra en en el Medio Oriente, aunque Bush se empeña en llamarle victoria y hasta ha asignado una enorme cantidad de presupuesto para celebrarla sin mencionar los más de 2 600 norteamericanos muertos solo en Iraq ni los que siguen muriendo o afrentan serias lesiones físicas y psicológicas a causa de esta “guerra ganada”; tampoco puede ocultarse ya que bin Laden es un producto neto de los servicios de inteligencia estadounidenses, ni que el propio “gendarme internacional” ofrece refugio a destacados terroristas de origen cubano (léase Posada Carriles, Orlando Bosh y todos los miembros de la FNCA, con sede permanente y protección en Miami), promueve la violencia y desestabilización en cualquier parte del mundo donde tenga intereses puramente económicos, sobre todo relacionados con el petróleo y practica la política del cuervo: comerse los huevos de los demás, pero gritar cuando otro intenta comérselos. Si esto fuera poco averigüe por qué Estados Unidos se niega a firmar el Protocolo de Kyoto y no quiere hablar de sí mismo en términos de desarme nuclear.
Como para reafirmar la validez del miedo, resulta que ahora aparecen también restos de víctimas bajo los escombros del Trade Center, después de 5 años, lo cual puede ser verdad, ¿pero no es sospechoso que resurja el fantasma del 11 de septiembre justo en época de elecciones?
¿Hasta cuándo el pueblo norteamericano va a soportar a Bush y sus secuaces? Eso nada más depende de que los habitantes de esa potencia económica se den cuenta de que están siendo manipulados vulgarmente, que ya no tienen derechos en el país que proclama la “defensa a nivel mundial de los derechos humanos”, que ocultan bajo sus narices a quienes deben combatir y encarcelan, vejan y torturan a verdaderos luchadores antiterroristas, como los Cinco Héroes Cubanos Prisioneros del Imperio.
Para mí, solo es cuestión de tiempo. Los grandes imperios nunca fueron eternos y este no será una excepción, se encuentra atrapado en sus mentiras, en sus desajustes e inseguridades sociales, véase el caso del huracán Katrina y Nueva Orleans, en su manía de exportar “guerras preventivas” con oscuros propósitos enmascarados bajo una fina tela de legalidad.
Lo repito, el pueblo estadounidense (pueblo en la acepción martiana de esta palabra) lleno de personas inteligentes y humanas, se dará cuenta de tanta injusticia en su contra y tomará cartas en el asunto para revertir una situación que cada vez más se le hará insostenible. La Historia tiene la última palabra.
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